Porque Todos Los
Que Son Guiados
Por el Espíritu
de Dios, Éstos Son
Hijos de Dios. Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en
temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos:
¡Abba, Padre! El Espíritu Mismo Da Testimonio A Nuestro Espíritu, De Que Somos Hijos de Dios. (Romanos 08:14-16)
Y El Que
Nos Confirma Con Vosotros En Cristo, y el que
Nos Ungió, Es Dios, el cual
También Nos Ha Sellado, y Nos Ha Dado las
Arras del Espíritu en nuestros corazones. (2da. a los Corintios 01:21-22).
Más vosotros no vivís según la carne,
sino según el Espíritu, Sí es que El Espíritu de Dios mora en vosotros. Y Sí Alguno No tiene
el Espíritu de Cristo, No es
de él. (Romanos 8:9).
Aún tengo muchas cosas que deciros,
pero ahora no las podéis sobrellevar. Pero
cuando Venga el Espíritu de Verdad, Él
Os Guiará a toda la Verdad; porque no hablará por su propia cuenta,
sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán
de venir. (Juan 16:12-13).
Porque nuestra exhortación no
procedió de error ni de impureza, ni fue por engaño, sino que según fuimos
aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, Así Hablamos; No Como Para Agradar a los
hombres, Sino a Dios, Que Prueba Nuestros Corazones. Porque
nunca usamos de palabras lisonjeras, como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es
testigo. (1Tesalonicenses 2:3-5.
Pero Dios Nos Las Reveló A Nosotros Por El
Espíritu;
porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque ¿quién de
los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en
él? Así tampoco Nadie Conoció Las Cosas de Dios, Sino El Espíritu de
Dios. Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, Sino El Espíritu Que
Proviene de Dios, Para Que Sepamos Lo Que Dios Nos Ha Concedido,
Lo Cual También Hablamos, No con palabras enseñadas por sabiduría humana, Sino Con
las que Enseña el Espíritu, Acomodando Lo Espiritual a lo Espiritual. (1 Corintios 2:10-13).
Pero Si Sois Guiados Por El Espíritu, No Estáis
Bajo La Ley. (Gálatas 05:18).
¡La Prueba Infalible
de Servir al
Dios Altísimo!
Estimados Lectores, si por
la Gracia de Dios pudieron leer su palabra hasta aquí, estoy plenamente
convencido, de que muchos de ustedes habrán notado que en la mayor parte de todos
estos pasajes, se encuentra: El Espíritu de Dios, o Lo que es lo mismo: El Espíritu Santo.
Y la razón de ello es
precisamente que: La Presencia del Espíritu de Dios en Nuestros Corazones,
Es la Única e indudable Prueba Infalible y Garantía
de que Realmente Servimos al Dios Altísimo.
A pesar de que hoy día
existen muchísimas sectas y religiones del anticristo, que Blasfeman contra el
Espíritu Santo, la biblia es muy clara al respecto, tal como lo señala en los siguientes versos:
“Por tanto os digo:
Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra
el Espíritu no les será perdonada.
A cualquiera que dijere
alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable
contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el
venidero.” (Mateo 12:31-32).
Como podemos observar,
Jesús fue sumamente claro y preciso al respecto; recordemos lo que nos dice en romanos
8:9=>
“Y Sí Alguno No Tiene
el Espíritu de Cristo,
No es
de él.”
Sin lugar a dudas, no
debemos engañarnos, pues cualquier persona, ya sea que tenga alguna religión o
no, y muy a pesar de de la misma pueda hacer muchísimas obras de Caridad, o
tenga todo el prestigio y buen testimonio de los hombres… Muy A pesar de tales
obras… La Única Verdad es que: “Por las obras de la ley
Ningún ser humano será justificado delante
de Dios” (Romanos 3:20).
Concluimos así: Cualquier Persona Que No
Tenga el Espíritu de Dios Morando
en su Corazón, Tal persona le está
sirviendo a todo el mundo, menos al Dios Altísimo; Mientras que Todos Aquellos
que Hemos aceptado a Jesucristo, hemos Recibido el Espíritu Santo en Nuestros
Corazones para Vida Eterna.
Estimado amigo(a) Ya antes de despedirme, si
usted aun no ha permitido que el Espíritu Santo venga a su corazón a través de Jesucristo,
para darle vida la Eterna, creo que esta es una especial oportunidad para
hacerlo, y para que sea El Espíritu
Santo Quien Le Ayude a
Discernir La Voluntad
de Dios para su vida…
Es muy sencillo, y a la vez muy gratificante,
simplemente repita esta oración:
Señor
Jesús, Hoy Te Doy Gracias por este día, Yo Creo En mi Corazón que Tú Eres El
Hijo de Dios, Y que Dios Padre Te Resucito de Entre los Muertos al Tercer Día
de haber Sido Crucificado por mis Pecados.
En Esta Hora Me Arrepiento de Todos Mis
Pecados, Te Pido Perdón por cada uno de ellos, y te pido que me
limpies con tu sangre preciosa, e Inscribas mi nombre en el Libro de la Vida. En
esta Hora Finalmente Te Acepto Como Mi
Único y Suficiente Salvador.
PADRE
TE DOY GRACIAS POR LA SALVACION DE MI ALMA, EN EL NOMBRE DE JESUS… Amén!!!